+ madama butterfly  + l'italiana in algeri  + la clemenza di tito  + orestes  + lucia di lammermoor 

+ introducción   + dos elencos   + dos cantantes   + el coro   + vestuario  

DOS CANTANTES:

HERNÁN ITURRALDE Y MARIANA REWERSKI

En esta primera entrega de las crónicas del “detrás de la escena” de L’italiana in Algeri, nos detendremos en dos de los artistas nombrados líneas arriba.

Para muchos podrá resultar novedoso el nombre de Hernán Iturralde, bajo-barítono argentino que el público local apreció recientemente como Paolo Albiani en la producción de Simon Boccanegra ofrecida por el Teatro Colón. Pero este artista, que ha residido durante muchos años en Alemania, posee una larga trayectoria y un vasto repertorio formado según las exigencias de los teatros de ese país. Comprende desde el estilo buffo rossiniano hasta el lirismo épico de un personaje como Gunther, en Götterdämmerung. Ha participado en diversas producciones de L’italiana in Algeri en teatros del extranjero, y el de Mustafà es un rol que domina con maestría. Es probable que para él no represente ningún secreto a estas alturas de su carrera, pero sí una vía inagotable para el disfrute que propone la recreación de este extraordinario “tirano ridiculizado”. La importancia vocal, el dominio estilístico y una personal comicidad, sorprenderán a un público para el cual este cantante representará un feliz descubrimiento.

Y el segundo nombre es el de Mariana Rewerski, joven mezzosoprano que en los últimos tres años ha dado muestras de sus amplias capacidades (abarca autores que van desde el barroco temprano hasta el siglo XX), y que en la temporada 2002 ofreció un Cherubino memorable en la producción de Le nozze di Figaro, en el Teatro Colón. De esto es fácil deducir que su nombre no es una novedad para el público porteño. Pero (no es una exageración prever lo que vendrá) con su interpretación de Isabella en la comedia rossiniana, los melómanos locales asistirán a uno de esos irrepetibles momentos, en los cuales una artista encarna por primera vez un personaje que pareciera concebido para ella; peculiaridades que se dan en el mundo lírico. No queremos adelantar detalles, sino mantener la expectativa. Por lo que hemos comprobado en los ensayos, aseguramos que con Iturralde formarán una dupla de lujo. Días atrás, a "la" Rewerski se le acaba de abrir una importante puerta en el extranjero: ha sido llamada para integrar el Opernstudio que depende de la Ópera de Zürich, una codiciada vía de acceso para integrar elencos en los que convergen figuras de renombre. Quizá, esta pueda ser una de las últimas posibilidades de verla actuar en Buenos Aires, posiblemente durante un largo lapso de tiempo. Asistir a la primera interpretación de un personaje en la piel de una artista que posee un fuerte toque distintivo (esa cosa mágica que no puede explicarse racionalmente), es un hecho del que no siempre se tiene la suerte de ser testigo, al menos a conciencia. No nos cabe duda: Mariana Rewerski es Isabella.