La ópera 'FIDELIO', de Beethoven, se dio en el Avenida
en el ciclo de Buenos Aires Lírica
Por Néstor Echevarría
LA PRENSA, Domingo 11 de abril 2010
Música para los sentimientos
'Fidelio', ópera en dos actos. Libreto: J. Sonnleithner y F. Treitschke. Música: Ludwig van Beethoven. Dirección: Guillermo Brizzio. Dirección coral: Juan Casasbellas. Régisseur: Rita De Letteriis. Escenografía y vestuario: Daniela Taiana. Iluminación: Alejandro Le Roux. Cantantes: Carla Filipcic-Holm, Peter Svensson, Homero Pérez-Miranda, Hernán Iturralde y otros. Coro Buenos Aires Lírica y Orquesta. Avenida (Avenida de Mayo 1222), viernes 9.
Resulta admirable cómo el genio musical de Ludwig van Beethoven se iluminó una vez más para acometer su primero y único intento operístico: 'Fidelio'. La obra francesa 'Leonora, o el amor conyugal' de Jean Nicolas Bouilly adaptada por sus libretistas, le dio ocasión de encender su genial estro para componer una oda al amor y a la libertad.
Una ópera que basada en una temática netamente romántica, debió presentarla y revisarla en diversas ocasiones a partir del estreno original hace doscientos cinco años, en 1805, en el Theater an der Wien, aún existente en la capital austríaca. Y lo hizo con varias denominaciones hasta la versión definitiva como 'Fidelio', cuando le significó un éxito perdurable.
AMOR CONYUGAL
Comulgan en su bella partitura los influjos del 'singspiel' germano con la belleza arrolladora, en el segundo acto, de sus vetas románticas, llegando a ser en simultáneo una glorificación del amor conyugal y un mensaje y un canto a la libertad.
Toda versión de 'Fidelio' requiere y reclama una inequívoca adaptación a la peculiar estilística beethoveniana. Y el resultado de la versión ofrecida por Buenos Aires Lírica en su primer programa de la nueva temporada en el Avenida fue altamente edificante por la nobleza lograda en conjunto, donde confluyeron el trabajo de concertación y dirección asumido desde el podio por Guillermo Brizzio, la cuidada preparación coral de Juan Casasbellas (fue muy acertado el coro en su gran momento final) y el adecuado marco escénico plasmado por la regista italiana Rita De Letteriis con buen manejo actoral y teatral, en una ambientación escenográfica sintética de Daniela Taiana, autora también del cuidado vestuario. La iluminación de Alejandro Le Roux también aportó su cuota en la ocasión.
LAS VOCES
En el escenario cabe resaltar el desempeño vocal de la protagonista Carla Filipcic-Holm. Poseedora de un generoso material vocal de soprano dramática, con una impostación bien desarrollada en su apoyo diafragmático y en pleno crecimiento en su carrera, plasmó el papel y cantó la bella aria 'Abscheulicher!' con impecable cuadratura vocal y emisión, explayando también sentimiento y hondura expresiva.
Una destacada labor correspondió al tenor vienés Peter Svensson, que mostró innegable oficio al plasmar su Florestan, cuya aria de la prisión denotó el drama del personaje y se destacó en el dúo con la protagonista. También el Rocco de Hernán Iturralde, vocal y escénicamente bien caracterizado y mejorando paulatinamente el Pizzarro del bajo-barítono de Chile Homero Pérez Miranda hacia el final, hicieron su contribución junto a la esforzada labor de Ana Laura Menéndez y Gustavo de Gennaro. Por su parte, el barítono Leonardo Estévez en su breve intervención como el ministro, lo hizo con seguridad y estilo.
En resumidas cuentas, una positiva recreación de la entidad para esta solitaria y perdurable expresión lírica beethoveniana.
